Cuando Dios hubo creado al primer hombre solitario, se dijo: "No es bueno que el hombre este solo", y le creo una mujer tomada, como el, de la tierra, y la llamo Lilith. Desde ese momento no cesaron de rivalizar entre si. Ella decia: "No me acostare debajo", y el decia: "Yo tampoco me acostare debajo, sino encima, pues tu estas hecha para estar debajo y yo encima." Ella le dijo: "Los dos somos iguales, pues ambos venimos de la tierra." Ninguno de ellos escuchaba al otro. Constatando esto, Lilith pronuncio el Nombre maravilloso y se oculto en el espacio aereo. Adan oro ante su Creador y dijo: "Soberano del mundo, la mujer que me has dado ha huido lejos de mi." En seguida, Dios envio a tres angeles en su busqueda, para hacerla volver. Dios dijo a Adan : "Si ella quiere regresar, todo esta bien. Si no debera aceptar que cien de sus hijos mueran cada dia." Los angeles partieron en su busqueda. La sorprendieron en el corazon del mar, en las aguas tumultuosas que, en el futuro, ahogaran a los egipcios. Le dieron la orden del Señor, pero ella no quiso volver. Le dijeron: "Te hundiremos en el mar." Y ella les replico: "Dejadme, he sido creada para enfermar a los niños de pecho: desde su nacimiento hasta los ocho dias, si son muchachos, yo me ocupo de ellos, y desde su nacimiento hasta los veinte dias si son niñas." Despues de haber oido sus intenciones, insistieron en capturarla. Ellas les hizo esta promesa: "Cada vez que vea vuestros nombres o vuestra imagenes inscritas en un amuleto, no tocare al bebe que lo lleve." Ella debio aceptar que cien de sus hijos murieran cada dia, y por ello todos los dias mueren cien demonios. Cuando escribimos el nombre de estos angeles en un amuleto llevado por los niños pequeños, Lilith los ve y se acuerda de su promesa, y el niño se cura.
Leyenda judia, Alfabeto de Ben Sira (siglo X).
(extraido del libro: "A la sombra de Lilith" de Carmen Posadas y Sophie Courgeon.)